Hoy los temas educativos y de relación personal han centrado la conversación.

 

Constatamos que el trabajo del voluntariado, en cualquiera de las diversas situaciones, genera una confianza personal que ayuda mucho a consolidar la seguridad de los "ayudados", al tiempo que provoca una elevación de su autoestima. Todo ello incide favorablemente en la consolidación de la personalidad.

 

En el caso de los jóvenes, no se detectan comportamientos especiales atribuibles a la etnia a la que pertenecen o en su condición de inmigrantes. Así, por ejemplo, los comportamientos "alocados" de los adolescentes se deben a la adolescencia, y no a su origen.

 

Asimismo, para un joven estudiante, tienen una mayor incidencia los consejos recibidos de un voluntario proveniente del propio país, que ha pasado por sus mismas situaciones de dificultad: ¡todo es más vital!, que los recibidos por parte de otra persona. Pero también tenemos la experiencia de que el afecto y la preocupación por los demás generan una confianza mutua que es capaz de superar graves dificultades.