La descolonización de África se realizó estructurando unas naciones artificiales, que eran ajenas a las etnias, y como consecuencia han resultado unos países multilingüísticos, multiétnicos y muy poco estables. Hay muchas etnias distribuidas por varios países, que hacen más difícil la convivencia y la organización civil.

La migración africana hacia Europa tiene los problemas de todas las migraciones. Pero, además, nos encontramos con el problema de la ablación de las chicas y los matrimonios de menores. La ablación es un hecho cultural tradicional, ajeno a las naciones y las religiones, y transversal a ellas.

En el proceso educativo y cultural, en general muchos jóvenes luchan por mejorar, pero muchas veces encuentran muy poco apoyo por parte de sus padres, porque estos no tienen horizontes amplios y altos. Y así, por ejemplo, a veces les desaconsejan seguir estudiando y les animan a ponerse a trabajar para ganar dinero.

La formación profesional es un buen instrumento para la inserción social, pero en amplios sectores de la sociedad está desprestigiada e infravalorada. Aunque actualmente la demanda de técnicos en formación profesional por parte de las empresas supera la de universitarios.

Los menas están en un "limbo". Debido al desembarco masivo, estamos desbordados y no se sabe exactamente lo que hay que hacer. Se dedica bastante dinero a paliar las situaciones, pero a veces parece como si sólo sirvieran para financiar las nóminas de varias ONG, de dudosa eficacia. Ni siquiera el sistema educativo ha sabido dar respuesta a este fenómeno. No han podido enseñarles la lengua ni establecer un proceso de continuidad académica.

Estamos de acuerdo en que se debe dejar de hacer "beneficencia", con una buena dosis de paternalismo, y estructurar un sistema de acogida en el que se proteja al inmigrante y al mismo tiempo se le exija, para que aporte a la sociedad y no se considere inferior.