Los estereotipos y los rumores se superan con el trato diario, la convivencia “real” y la relación personal
Hablamos de la situación provocada en Suiza por referéndum hace pocos días. El rechazo a la inmigración europea ha sido mucho más alto en los cantones donde no hay prácticamente inmigración. Parece ser que una explicación es el miedo a lo desconocido. En cambio, en los cantones con alta inmigración el rechazo ha sido muy pequeño.
Muchas veces nos dejamos llevar por estereotipos y rumores. Por ejemplo en el tema sanitario: se piensa que los inmigrantes colapsan el sistema y no pueden acceder los autóctonos. Con datos en la mano, se ve que esto no es así. O por ejemplo, la creencia de que a los inmigrantes no se les piden las mismas exigencias que a los autóctonos en materia de comercio, y no tienen que cumplir unos horarios comerciales; cuando resulta que la legislación vigente dispone que las tiendas de menos de 120 m2 que venden productos de alimentación, droguería y limpieza no están obligadas a cerrar a las 22 h, ni tampoco los días festivos. Pero resulta que los españoles no quieren hacer estos horarios de trabajo.
En la lucha contra los estereotipos y los rumores es fundamental la acción de los medios de comunicación, que deberían resaltar con más naturalidad y firmeza la diversidad actual de nuestra sociedad. Aunque se ha hecho mucho en los últimos años, aún tenemos mucho espacio para recorrer.
En la vivencia diaria, es necesario incidir en los valores y comportamientos éticos, que ayudan a la cohesión social y a mantener la convivencia.